El aumento de la dependencia del consumo eléctrico y de combustibles más su continuo aumento de precios ha conducido a las empresas a elevar sus costos productivos. A esto se suma el exponencial aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, lo cual es el resultado de la quema de combustibles y la principal causa del calentamiento global. Debido a esto los gobiernos y el sector privado han establecido medidas de acción, incorporando la aplicación de la eficiencia energética y el aumento del uso de las energías renovables no convencionales. El sector agrario también se ha visto afectado por esta situación, ya que estas empresas necesitan del uso de electricidad para el funcionamiento de sus bombas hidráulicas y de combustible para el uso de camiones y tractores. Además, la particularidad de este sector productivo es la estacionalidad del proceso de riego, ya que coincide con los meses en que encontramos una elevada radiación solar. Por lo tanto, se podría pensar que es lógico utilizar la energía del sol para realizar esta tarea.
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